La fábrica de las oficinas

 

Tengo una devoción enfermiza por las exploraciones, pero siempre he intentado buscar la historia de todos los sitios para entender el porqué de su abandono. Esta fábrica se dedicaba a la fabricación y comercialización de mobiliario metálico para oficinas y su abandono supongo que tendrá relación la crisis.

Antes de entrar ya se veía su deterioro por todas partes, ventanas y vallas rotas, pintadas por todas partes... lo típico de una fábrica que está a pocos metros de una ciudad. Pero en su interior como podréis ver, aún quedaban bastantes detalles.

 Fotografías de los exteriores donde podemos ver que la fábrica era bastante grande.

 Restos de lo que parecía ser un intento de cama, al menos el que estuviera allí estaría refugiado de la lluvia.

 Los interiores eran enormes, dignos de una ''rave peliculera''... posiblemente ya a habido alguna.

 Una de las cosas que más respeto me daba, las enormes cristaleras del techo se caían a trozos.

 Esas columnas, lo único que seguía en pie...impresionante.

 Esto ya corresponde a la nave de al lado, exactamente igual de grande que la primera.

Una de las salas donde los protagonistas eran los pantalones, las botas y las camisetas.

 Y cuando parecía que de allí no podíamos sacar nada más, otra enorme sala (ésta más pequeña) apareció detrás de una pequeña puerta con los cristales rotos.

 Seguramente habían acumulado allí toda la mar de hierros de la fábrica.

 Los ''graffiteros'' ya han dejado su banco de herramientas allí.

 Puertas y más puertas, desde fuera no parecía que allí hubiera tantas cosas en pié.

Arriba la mejor fotografía (para mi), abajo parte del final de la segunda sala.

 

Algunos detalles que me parecieron interesantes, el poster y el calendario, seguido de un cuadro, las fichas de entrada y salida de los trabajadores y una nota para estos.

 La entrada a las oficinas aún conserva su camino y algunas plantas.

 Los lavabos, una pintada que supongo, será de uno de los trabajadores y otra nota en la puerta.

 Nos fuimos por el mismo camino que entramos, haciendo unas últimas fotografías y despidiéndonos de una exploración bastante entretenida a pesar de estar en pésimas condiciones. 

Un último adiós a la fábrica, un lugar que hacía años que tenía visto y que al final visité.